jueves, septiembre 13, 2007

Propuesta revolucionaria para el cambio del huso horario / Olga Ramos

Con motivo de la propuesta del cambio en el Huso Horario que está proponiendo el Ministro Héctor Navarro, la profesora Donatella Pizzi, hizo unas importantes consideraciones que envió, a través de una carta, al ministro. La reflexión de Donatella, me hizo pensar que quizá el cambio que propone Navarro, no es el que corresponde al momento que vive el país y en consecuencia, quiero contribuir a un replanteamiento de esa propuesta. Este está recogido en una nota de respuesta a la carta de Donatella a Navarro, que les copio a continuación:

Excelente tu explicación y precisiones Dona!!!

No obstante, dado el momento histórico que estamos viviendo en este país, se me ocurre que Venezuela merece un cambio mejor al que propone Navarro, uno más acorde con los tiempos revolucionarios. Porque el establecimiento del huso horario, tal como hoy lo conocemos, es una de las acciones más imperialistas de las que la historia tenga referencia, pues, tal como lo reseñas, las reglas de juego fueron decididas en una reunión realizada en la cuna del imperialismo yanqui opresor en 1884 y el punto de referencia 0 asumido queda en el territorio del "imperio del imperio". ¿Es que acaso el "Real Observatorio de Greenwich" puede seguir siendo considerado hoy, como la referencia más válida del centro del mundo? Creo que esa decisión responde a una visión que, por ser imperialista, occidental y eurocéntrica, favorece una forma de ver al mundo, una lectura de la historia que atenta en contra de los valores tradicionales de los pueblos africanos, asiáticos y americanos, en especial latinoamericanos, que han sido tan vejados y golpeados a lo largo de la historia de la humanidad.

Por otra parte, Dona, tienes mucha razón al afirmar que cada país tiene derecho a establecer la hora oficial que lo rija. Sin embargo, en un país como el nuestro, revolucionario de verdad, en el que la soberanía, a partir de la reforma constitucional, residirá en el pueblo, pero, en el pueblo organizado a través de los Consejos Comunales, creo que es menester replantearse no sólo cuál es el meridiano que debe tomarse como referencia 0 para determinar la hora, sino las reglas mismas que se establecieron en ese acuerdo de 1884.

Para ello, propongo que lo primero que se discuta es si debe existir una sola hora legal que sea común a todo el territorio nacional, o si cada Consejo Comunal, haciendo uso del poder que le conferirá la constitución después de la reforma, defina la hora que se considerará oficial en su territorio. Hora que, entre otras cosas, no deberá ser fija, ya que, como el cambio es algo natural e inherente a la vida, es de esperarse que sea la propia dinámica de cada uno de los Consejos Comunales la que la ajuste cada vez que lo requiera. Así se dará cumplimiento a dos principios altamente revolucionarios: 1.- el ejercicio de la soberanía por parte del pueblo organizado y 2.- que las normas que se establezcan no se conviertan, en un futuro, en una camisa de fuerza que limite la acción de los verdaderos revolucionarios.

El segundo aspecto a discutir, es obviamente si debemos seguir sujetos a esa visión del mundo imperialista, occidental y eurocéntrica que divide de forma arbitraria al mundo en occidente y oriente, como lo hace la línea del Ecuador entre norte y sur. Estas divisiones que, tradicionalmente han sido asumidas con muy poco debate, para el que merecen, tienen asociada una escala de valores que da prioridades e importancia a los países y en consecuencia a sus habitantes, de acuerdo al lugar geográfico en el que se ubican con respecto a estas nefastas referencias. Esto que, todos sabemos, ha sido determinante en la geopolítica mundial, debe ser cambiado y es hora de que el gobierno revolucionario del Presidente Chavez asuma la vanguardia en ello.

Fíjate, en el caso del Ecuador, dado que es obvia e indiscutible la razón por la que se escoge esa franja como referencia geográfica, la discusión que debe plantearse es si éste debe dividir al mundo en norte y sur, o si debe diseñarse otra denominación que no esté asociada al esquema de dominación política que se ha instrumentado a nivel mundial desde la visión imperialista y eurocéntrica que predomina actualmente de forma hegemónica. Pero en el caso del meridiano 0, la discusión es no solamente la nomenclatura hegemónica que está asociada a un esquema de dominación de la "cultura occidental" sobre el resto, sino la ubicación misma de esa referencia. Al respecto, me debato entre dos propuestas:

1.- Cambiar la referencia 0 a un lugar del mundo diferente, un lugar que actualmente sea emblemático por las transformaciones que desde él se gestan para el mundo, por ser la cuna de una visión diferente, anti-imperialista, multicéntrica o multipolar como se ha autodenominado, y pluricultural, que permite romper con los patrones hegemónicos vigentes. Obviamente se me ocurre que, como el territorio nacional es tan extenso y se necesita un punto de referencia, se proponga que sea el punto que pasa por el Samán de Güere el que se escoja para que pase el meridiano 0, ya que, ese sitio es un símbolo emblemático del "árbol de las tres raíces" que orienta sabiamente el pensamiento revolucionario en Venezuela. (Aquí en privado te confieso que como villacurana de corazón, pues me crié en esas tierras, preferiría que se tomara como referencia el meridiano que pasa por la Iglesia de ese pueblo que fue mi referencia horaria a lo largo de mi infancia y el que miraba todos los días para saber la hora camino a la escuela, pero entiendo que esa tradición que conservamos los villacuranos a pesar de que dejó de ser la del meridiano de referencia para Venezuela en 1964, debe ponerse en segundo plano, ante la importancia de lograr un cambio verdaderamente revolucionario)

2.- Que cada país y cada cultura, de acuerdo a sus referentes tradicionales, escoja el punto de referencia 0 a partir del cuál fijará su hora. Te cuento que, esta propuesta, aunque requiera de un reajuste mundial concertado y complejo, creo que es la que se adapta más a una visión realmente revolucionaria porque está sustentada en una interpretación pura y dura del derecho a la autodeterminación que tienen los pueblos y del ejercicio de la democracia.

Como verás, considero que el tema que escogió el ministro Navarro para promover un cambio, tiene una potencia única y no aprovechada para la promoción de cambios revolucionarios a nivel mundial que muchos en el país no están apreciando. Es una lástima porque Navarro siempre ha sido un hombre visionario, a pesar de que a su obra revolucionaria no parece que le den la trascendencia que merece. En educación siempre lo recordaremos por ser el promotor de la Instrucción Pre-militar como materia obligatoria en educación media, de la Resolución 259 (que cambiaba los programas de ciencias sociales y modificaba la lectura de la historia contemporánea de Venezuela, que tuvo que echar para atrás diciendo que había firmado sin leerla), del Decreto 1011 que el país entero recuerda, y del Proyecto Educativo Nacional y la Constituyente Educativa coordinada por Carlos Lanz, entre otras cosas.

Espero conocer tus impresiones sobre mi humilde propuesta.

Olga Ramos

12092007